
Por Redacción —
Este domingo 29 de junio, las provincias de Formosa y Santa Fe llevaron adelante elecciones para elegir diversos cargos provinciales y municipales.
En Formosa, se designaron 15 diputados titulares, ocho suplentes y 30 convencionales constituyentes encargados de la reforma de la Constitución provincial, además de autoridades locales y concejales en varios municipios.
Con más del 99 % de las mesas escrutadas, el Partido Justicialista (PJ) liderado por Gildo Insfrán, representante del oficialismo provincial, alcanzó entre el 67,15 % y el 67,33 % de los votos en las categorías de diputados y convencionales. El Frente Amplio Formoseño obtuvo entre el 20,62 % y el 20,88 %, mientras que La Libertad Avanza sumó entre el 10,94 % y el 11,18 %. La participación ciudadana estuvo cercana al 71 %, marcando el nivel más alto en comicios provinciales de este año.
Por su parte, en Santa Fe se eligieron intendentes, concejales municipales, jefes comunales y contralores de cuentas en 365 localidades, incluyendo la ciudad de Rosario y la capital provincial.
El oficialismo vinculado al gobernador Maximiliano Pullaro ganó en más del 80 % de los distritos del interior provincial. En la ciudad capital, la fuerza Unidos para Cambiar Santa Fe, con María del Carmen Luengo como candidata, fue la más votada, consiguiendo el 32,7 % de los votos y tres bancas en el Concejo Municipal. En segundo lugar se ubicó Más para Santa Fe con el 25 % (candidato Pedro Medei), obteniendo dos bancas; mientras que La Libertad Avanza alcanzó el 23,4 %, también con dos bancas. Otras fuerzas como Santa Fe Común lograron el 9,19 %, Propuesta Federal el 5,56 %, y Somos Vida y Libertad el 4,23 %.
En Rosario, el peronismo liderado por Juan Monteverde obtuvo el 30,57 % de los votos, en una contienda muy ajustada frente a La Libertad Avanza (28,79 %) y Unidos para Cambiar (25,7 %). Un aspecto relevante fue el alto nivel de ausentismo registrado, inusual para una elección en la provincia de Santa Fe.
En síntesis, Formosa ratificó la hegemonía del oficialismo provincial, mientras que en Santa Fe se confirmó el dominio del gobierno en el interior de la provincia, con competencia más reñida en las principales urbes.