Por Redacción —
El Ejecutivo nacional anunció una nueva actualización en los tributos que afectan a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono, estableciendo cambios vigentes desde el 1° de julio.
El Gobierno nacional, mediante el Decreto 441/2025 divulgado este lunes en el Boletín Oficial, formalizó un ajuste parcial en los impuestos aplicados a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono, que comenzará a regir desde el próximo 1° de julio.
Aunque esta disposición supone un aumento en los valores de la nafta y el gasoil, el Ejecutivo decidió postergar parcialmente el ajuste completo para suavizar su impacto sobre la inflación. Sin embargo, se anticipa que el incremento total será implementado a partir del 1° de agosto.
Este movimiento se produce en un entorno de alta sensibilidad respecto a los precios internos y presiones sobre los costos logísticos, mientras el Gobierno trabaja para contener la inflación y mitigar el efecto del ajuste fiscal en los bolsillos de los consumidores.
La semana pasada, las petroleras ya habían anunciado un aumento promedio del 5% en los precios de combustible en surtidor, vinculado mayormente a la subida temporal del precio del barril de petróleo internacional producto del conflicto entre Israel e Irán. El crudo Brent alcanzó a superar los 75 dólares por barril antes de experimentar un retroceso.
Tras la oficialización del nuevo régimen tributario, se aguarda que las compañías petroleras evalúen su impacto real y determinen si implementarán nuevas actualizaciones en los precios en los días venideros.
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