
Por Redacción —
Esta semana, Ramiro Egüen, el intendente de 25 de Mayo, volvió a estar en el centro de la controversia política. Originalmente, Egüen fue uno de los primeros jefes comunales en vincularse con La Libertad Avanza (LLA), aunque ganó las elecciones locales con un sello vecinalista. Recientemente, aseguró que existe un pacto para destituirlo que incluiría a algunos de sus antiguos aliados políticos.
El conflicto parece haberse iniciado a principios de septiembre, cuando el bloque de concejales de Fuerza Patria presentó un proyecto para instaurar una comisión investigadora destinada a examinar la legalidad de dos decretos firmados por Egüen. Con el respaldo de un concejal libertario, otro de PRO y uno del radicalismo, el peronismo alcanzó la mayoría necesaria para no solo crear la comisión sino también para derogar las normas cuestionadas.
La sesión ordinaria del Concejo Deliberante se tornó tensa y terminó en desorden cuando Egüen irrumpió de manera imprevista, sentándose junto a las autoridades del cuerpo y levantando la voz para interrumpir el desarrollo del encuentro.
En una confrontación directa, afirmó: “Estoy aquí para que me investiguen y me pregunten todo lo que quieran, porque no tienen nada para acusarme”. Además, lanzó duras palabras contra sus opositores: “Son unos impresentables y encabezaron el gobierno más corrupto en la historia de Veinticinco de Mayo. Antes de irse firmaron 600 decretos, se llevaron todo y dejaron solo 7 millones de pesos en las arcas municipales”.
Al día siguiente, en declaraciones públicas, el intendente sostuvo firmemente que dirigentes del kirchnerismo, acompañados por José Luis Guarch (LLA) y Claudia Lobosco (PRO), habrían conspirado para destituirlo. Según Egüen, “ayer en el Honorable Concejo Deliberante se vivió un intento grave de golpe institucional”.