
Por Redacción —
La Municipalidad de La Plata organiza este sábado 5 de julio, de 10:00 a 18:00, la primera edición de la Feria Agroecológica Municipal Itinerante (FAMI) en la Estación Meridiano V. Este evento busca fomentar la producción agroecológica dentro de la región y ofrecer a la comunidad un espacio único para aprender, compartir y disfrutar en familia.
La feria, que tendrá una ubicación distinta en los variados barrios de La Plata cada semana, presenta una agenda diversa que incluye venta de productos agroecológicos y múltiples actividades para promover el conocimiento sobre prácticas sostenibles.
El día comenzará con la apertura de puestos y una radio abierta, además de un acto formal para dar inicio a la jornada. Por la tarde, el público podrá deleitarse con la música folclórica presentada por La Nadia Matilde, seguida del entusiasmo de Anabel y el grupo de Manu Quiroga.
En paralelo, se realizarán talleres educativos y espacios de formación sobre temas clave como la soberanía alimentaria y técnicas en agroecología. Los asistentes podrán conocer una huerta gestionada por estudiantes y egresados de la Tecnicatura Universitaria en Agroecología, además de participar en charlas especializadas sobre sistemas agroforestales, compostaje y elaboración de compost.
Para los más pequeños, el evento ofrece un espacio recreativo con propuestas como Historias Dibujadas, donde los niños y niñas pueden expresarse a través del dibujo y la escritura libre. Asimismo, el espectáculo Circonciente presenta a payasos que combinan la naturaleza, historias, juegos, emociones y música para fomentar el aprendizaje lúdico.
Durante toda la feria, el público podrá disfrutar del patio de comidas con una amplia y variada oferta gastronómica; visitar la muestra fotográfica EcoRutas: Narrativas del cordón frutihortícola platense; y participar en un espacio dedicado al intercambio de saberes y semillas, favoreciendo la conservación y diversidad local.
Es importante destacar que la agroecología representa un modelo innovador y alternativo a la producción agrícola tradicional, priorizando la sustentabilidad en sus dimensiones social, cultural, económica y ambiental. Adoptar y difundir estas prácticas contribuye a reducir los impactos negativos de la agricultura convencional y genera beneficios sociales, ecológicos y económicos.
Además, fomenta el acceso a alimentos más saludables, fortalece el arraigo cultural y protege la salud de quienes trabajan en el campo, consolidando un vínculo respetuoso y armonioso con la tierra.